no todas las cosas que otra persona tiene para decir nos llaman la atención y este era uno de esos casos... para decir la verdad, todos tienen algo interesante para decir... el problema es que la mayoría no sabe que le resulta interesante a su interlocutor, una primera charla con alguien se asemeja a una búsqueda del tesoro mutua en donde uno está tratando de encontrar la llave de una conversación en la otra persona...
creyéndome perro... me despedí con un "espero cruzarme otro día por aquí con ud." y emprendí la retirada... no era de día por pura casualidad cuando nos despedimos pero lo era cuando llegué a casa... en el camino iba sumergido en mis propios pensamientos... una de esas conversaciones que uno tiene con uno mismo en la que no pude encontrar ni una sola llave de conversación para mi propio cofre... triste situación para cualquier feliz propietario de un tesoro...
2 días después... la llamé...